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Cerré mis ojos y me deje caer.
Al final,
Ahí estabas tú.
Mirándome como siempre,
Tendiéndome una mano,
Borrando todo dolor de mis recuerdos.

¿Por qué sigo aquí?
¿Por qué tan lejos de ti?


Comentario: Nunca es tarde para volver a empezar, con solo quererlo basta. Pero ojo, que no es fácil olvidar. Los recuerdos no matan, pero duelen y hay que perdonar al pasado para dejar volar el futuro.


Comadre, nada es fácil.

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Quiero comentar que no es fácil hablar, que no es fácil decir lo que esta dentro de mí.
Quiero contarte todo lo que algún día pensé, todo lo que en algún momento me acompaño.
No es fácil, no es fácil hablar, no es fácil decir lo que llevo dentro de mí.
Que cursi, que complicado, y que extraño es no poder mirar el mundo al revés.
Pero espero siempre mi segunda oportunidad, yo se que está y que la vida encontrara el momento para entregarme algo de verdad. Estoy dispuesta a dejarme llevar solo espero alguna brisa que me anime de verdad.
Que extraño, que extraño es necesitar tus brazos para poder llorar una vez más.

Nos volveremos a ver, pero aún no.

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A veces me pregunto que habrá más haya, y te veo a ti.
A veces cierro mis ojos y apareces tú, pero cuando los abro desapareces sin decir nada.
Te encuentro en olores, colores, lugares y hasta en emociones.
De vez en cuando te paseas por mis sueños. Es como si vinieras para ocasiones importantes. Nunca puedo esperar más que una visita fugaz, porque siempre te vas. A veces siento que me dejas, pero luego de pensarlo por unos minutos me retracto y me molesto un poco por pensar aquello. Siempre te recuerdo a ti y a mí sentados riendo, pero me entra el miedo y me cuestiono sobre tu imagen. A veces pienso que no es real y que la invente producto de mi tristeza, pero para dejar de pensar miro una foto tuya y me doy cuenta de que sigues aquí como siempre.
Solíamos conversar de la vida, cosas inútiles y algunas cosas importantes. Solías decirme cosas exactas, palabras justas y con frases perfectas sembrabas miles de sonrisas.
A veces me siento un poco tonta pensando en tu ausencia y me tiro a la cama cerrando los ojos e intento conversar contigo, normalmente me frustro no encontrando respuesta, pero lo sigo intentando.
En algunos momentos me dejo llevar y comienzo a llorar, pero solo me dura unos minutos porque te recuerdo haciéndome sonreír. Es como si dejar caer mis lagrimas fuera un mecanismo para recordarte con esas palabras en la boca, ¡sí! Esas palabras.
Ahora después de tantas risas solo hablo yo, e intento dejarme sentir tus respuestas.
A veces siento que me sigues con tu voz, y giro para encontrarme contigo pero no estas, y aunque siempre se que al voltearme no te veré, sigo haciéndolo para encontrarme con una sorpresa, pero parece que siempre es el viento que juega conmigo.
De vez en cuando las cosas se ponen difíciles por aquí, pero después de tantos malos momentos estoy tranquila porque sé que sigues aquí y que aunque mis ojos no me dejen verte, lo podré hacer algún día.
Nos volveremos a ver, pero aún no.

El mejor día de mi vida.

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Intento cambiar de dirección, o por lo menos saber a donde voy porque me asomo y no alcanzo a ver nada, es como si todo terminara unos metro más haya y me aterra. ¿Que quiere decir? Tal vez es porque el futuro se crea de a poco.
¿Te has preguntado que tiene el futuro preparado para ti? Yo me lo pregunto una y otra vez hasta que me canso y dejo de pensar en eso. La mayoría de la veces no llego a ninguna conclusión decente, me quedo en miles de “no se”: No se que estudiar, no se si casarme, no se donde vivir, y bla bla bla. Los clásicos “no se” de la existencia, ¿o alguien me puede decir que siempre estuvo seguro de todo? Uf si es así que me ayuden.
No es tanto el casarse, la carrera y todas esas cosas secundarias, si no que ¿viviré?
Gran pregunta y la clásica respuesta: “pero por supuesto ¿Qué edad tienes? Te queda toda la vida por delante” ¡SHÍ! Que saben ellos. Me imagino a una vieja facha de traje, con pelo corto y blanco diciéndome todas esas frases supuestamente alentadoras. ¿Y esa vieja quien es?
Bueno y si me equivoco, me equivoco no más, que va a pasar. No me voy a poner a escuchar a esta vieja. La idea creo que es vivir como salga en el momento, o por lo menos después de escribir todo esto es lo único que se me ocurre, aparte ¿para que preocuparse tanto?
Como una vez alguien me dijo “hay que disfrutar el momento” y sí, ¿para que vivir si no vamos a disfrutar?, uno nunca sabe que hay en el mañana y tampoco hay que preocuparse por lo que traiga. Lo importante es hoy y como haré para que este día sea el mejor de mi vida.

Coca-cola Express

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Coca-cola Express:
(Si es que recuerdo bien tu nombre)
Hace unos días intento contactarme contigo para conversar y aclarar unas dudas que me perturban en los sueños. Aun no se si eres real o una creación de mi mente pero intento averiguarlo. Estoy investigando sobre tu existencia, pero no encuentro nada aun y eso me acerca a la conclusión de que tú no existes.
Mis sueños me cuentan que con tan solo 100 pesos en mis manos pude intoxicarme con tu brebaje oscuro.

Según yo, la coca-cola Express se trata de una botella de coca-cola que costaría ni más ni menos que 100 pesos, esto sería así porque el consumidor deberá devolver el envase luego de tomarse el brebaje, ósea, me explico: Vas al quiosco más cercano, pides tu coca-cola Express, la destapas, disfrutas de su sabor, y luego devuelves el envase, todo eso por solo 100 pesos.
Toda esta duda es porque creo haber visto el comercial pero no estoy segura de aquello, y aparte soñé que me tomaba una rica coca-cola Express.
¿Que te hace tan atractiva al mundo coca-cola?

Mejor ni preguntarme porque decidí escribir esto, pero si alguien tiene alguna información sobre la supuesta coca-cola Express que me lo haga saber porfavor.
AH! y algo más, ¿Porque involucrar a los osos polares en todo esto?

algo.

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En sus ojos reposaban los sueños. Todo lo que podía sentir cuando el me miraba se traduce a un brillo único y especial, lleno de sensaciones, como si miles de estrellas vivieran en su mirada regalando energía a quien se atreviera a amar esos ojos.
Sus manos eran calidas y acogedoras. Cuando me tocaba podía sentir como miles de colores inspeccionaban mi interior dejando su residuo mágico en mi memoria.
Sus besos eran azucarados como miel e infinitos como los sueños (...)